Momentos inolvidables junto al mar

Despertar cada mañana con la vista al mar fue un sueño hecho realidad. La variedad en el buffet fue sorprendente, con platos locales y opciones internacionales que deleitaron nuestros paladares.

Sin embargo, tuvimos un problema con la limpieza, ya que algunas áreas de nuestra habitación no se limpiaron a fondo durante nuestra estancia. La cama, con dos camas individuales, no era lo que esperábamos.

Aprovecha la opción de cambiar la cena por el almuerzo si prefieres cenar más tarde y disfrutar de la comida local cerca del hotel.

Hermosas vistas al mar, ubicación con acceso directo a la playa, entretenimiento en áreas de relajación.

Menor tamaño de piscina y congestión en horarios pico pueden arruinar la experiencia!!! ¡Faltan opciones de snacks durante el día y la limpieza matutina puede ser ruidosa y molesta!!!

el ambiente era genial, me encantó la música en el bar chillout. el desayuno podría ser más caliente.

cerca de todo para explorar ibiza a pie fácilmente

Me encantó la comodidad de poder caminar hasta la playa y disfrutar de la vista en el Paseo de Ses Fonts, que está a menos de 20 minutos a pie, además del trato exquisito del personal que te hace sentir como en casa, como M. Piedad y Santi. sin duda, una experiencia muy placentera para un viajero como yo que ama el bullicio y la belleza de la ciudad.

Vistas espectaculares al mar al cenar.

Las instalaciones son adecuadas y la habitación espaciosa y limpia, además la comida del restaurante ha mejorado notablemente. Sin embargo, el servicio en el bar durante las actuaciones podría ser más eficiente y el horario de las cenas puede resultar incómodo para quienes deseen un poco más de flexibilidad.

a Decoración moderna
b Vistas espectaculares
c Servicio atento

a Tamaño de habitación reducido
b Horario de cena restringido

La variedad en el buffet es tan sorprendente que podría hacer que un chef experimentado llore de envidia. Desde platos locales llenos de sabor hasta opciones internacionales que te llevan de viaje a través del paladar, es un festín constante tanto para los ojos como para el estómago. Y para relajarse, la piscina tiene un ambiente tan acogedor que uno podría olvidarse de que hay un mundo exterior.

Asientos limitados

una estancia placentera con detalles que mejorar

Las habitaciones estaban muy limpias y los colchones eran cómodos, lo que facilitó un buen descanso. La amabilidad del personal se notaba en cada interacción, haciendo que nos sintiéramos bienvenidos y atendidos. La ubicación del hotel era ideal, con vistas al mar que hacían más especial nuestra estancia.

Sin embargo, echamos en falta un horario de cena más flexible.

El hotel es ideal para pasar unas vacaciones con amigos. La ubicación es excelente, cerca de Marina Botafoch y del Puerto de Ibiza, perfecto para disfrutar de la vida nocturna. Las habitaciones son cómodas y el buffet variado y sabroso. Además, la recepción está disponible las 24 horas para ayudarte con excursiones y planes.

Una experiencia negativa fue el trato de un empleado del buffet que me hizo sentir incómodo al mencionar el pago antes de servir. A pesar de esto, el resto del personal fue amable.

Disfruté de la reforma del restaurante. la comida ha mejorado enormemente en calidad. Las vistas desde mi habitación eran simplemente espectaculares, un lugar donde definitivamente volveré. Aunque el horario de cenas es un poco apretado, el ambiente en el bar tenía su encanto, solo deseé más animación.

La decoración del hotel es moderna y acogedora, con acabados elegantes. Además, el área de la piscina tiene cómodas tumbonas y un ambiente relajante para disfrutar de las magníficas vistas al mar.

Sería ideal contar con más asientos cómodos.

La ubicación es excelente, justo al lado de la playa, y el bar chill-out tiene vistas espectaculares al mar. El personal del bar durante las actuaciones es un poco lento, lo que a veces puede ser frustrante.